lunes, 31 de julio de 2017

CÉSAR MEDINA - BOCOS O LA HIDALGUÍA DEL POETA


César Medina-Bocos fue un hidalgo poeta o un poeta hidalgo, tanto da que da lo mismo. Con su caballo, iba el poeta con la tranquilidad violeta, como dijo Juan Ramón en unos versos. Con su caballo, recorría las tierras y se llenaba del olor de los rastrojos. Con su caballo, el alba lo encontraba en los pinares redescubriendo el mundo. César Medina – Bocos nació en Pedrajas de San Esteban, pero se casó en Serrada y hasta la casona de Serrada se fue y en ella, como parra fecunda, alimentó a sus muchos hijos. Medina –Bocos escribe con elegancia, no habla de penes ni de vulvas, ni nos cuenta un orgasmo en vivo y en directo porque es un caballero, un poeta que, todas las tardes, recorre los caminos mientras el sol se va poniendo por los tesos. A mí, como soy un tío antiguo, su poesía me gusta y disfruto con ella. Que fuera un hidalgo no me parece bien socialmente porque esa idea del hidalgo de que trabajen los romanos que para eso tienen el pecho de lata ha sido la ruina de España, pero la estética del hidalgo me gusta. Pero, claro,  el hecho de ser hidalgo te convierte en un elemento políticamente irrecuperable para la izquierda de este país cuya estética ha sido siempre de sobaquina, pana y lana y eructos tabernarios. Si el hombre tenía sus tierras, era medianamente rico y además montaba a caballo, es decir, lo más parecido a un señorito que ha de ser pasado a cuchillo pues no iba a ser de Podemos. Vamos, digo yo. Espero que me crucifiquéis por lo que he escrito y que me lluevan los comentarios airados, pero como nadie me lee, ni siquiera voy a darme ese gustazo.

Puso esta décima en su tumba, porque Medina – Bocos, por si no eran pocos sus defectos, también era católico:

Si eres cristiano, sé fuerte

y en este lugar sagrado

piensa en Dios y odia el pecado,

pero no temas la muerte.

Alza la vista y advierte

que tu victoria pregona

esa cruz que le corona,

prenda de infinito amor

del Divino Redentor

que resucita y perdona.

 



No hay comentarios:

Publicar un comentario